Autopistas del Caribe, hacia el desarrollo sostenible

Construir grandes proyectos de infraestructura de manera consciente con el medio ambiente y las comunidades, el gran reto.
Los programas de gestión social están enfocados en iniciativas productivas, educación ciudadana y cultura vial.

La ejecución de las obras sin duda genera una oportunidad de desarrollo económico y social en las zonas de influencia y cada vez se hace más relevante la necesidad de crear estrategias que mitiguen y compensen los impactos socioambientales que se puedan producir. 
Proyectos como Autopistas del Caribe Corredor de Carga Cartagena – Barranquilla, tienen claro este propósito. Esta iniciativa privada conectará las capitales de Bolívar y Atlántico a través de la construcción de 74 kilómetros de segundas calzadas, 20 kilómetros de variantes en calzadas sencillas y 8 intersecciones a nivel y desnivel en dos de las principales arterias viales de la región: la Troncal de Occidente y la vía La Cordialidad. 
Para hacer realidad esta iniciativa, que se encuentra en fase de preconstrucción de estudios y diseños, trabaja en la tramitación de las nueve licencias ambientales para cada una de las unidades funcionales constructivas. Un proceso que consiste en la identificación de los posibles impactos sobre el entorno natural y socio económico de las áreas a intervenir y así desarrollar mecanismos que permitan la mitigación, minimización y compensación de estos. 

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Más de 4.000 empleos directos y 2.700 indirectos generará este proyecto.

De igual manera, con el fin de respetar los ecosistemas y evitar afectar las áreas protegidas forestales y parques nacionales regionales que hacen parte del área de influencia, además de las rondas hídricas de importantes cuerpos de agua como la Laguna de Luruaco y el embalse del Guájaro en el Atlántico, realiza ajustes a los diseños para proteger los recursos naturales de la región.

Generación de empleo
Como parte del compromiso con las comunidades, el desarrollo de este proyecto generará más de 4.000 empleos directos y 2.700 indirectos para la población del área de influencia. Además, ejecuta nueve programas de gestión social que, de la mano de diferentes actores sociales, promueven el conocimiento del proyecto, el fortalecimiento de iniciativas productivas, la educación ciudadana y la cultura vial.