Costo del impuesto vehicular: ¿Cuánto bajaría?

Esto se daría si se pagara por los días en que se utilizan los carros.

En los últimos meses ya son varios los representantes del Legislativo y parte del Ejecutivo que han propuesto una reforma al impuesto vehicular en las ciudades que cuentan con pico y placa.
Solo en Bogotá, comienza una ‘mala semana’ para quienes usan su carro frecuentemente y la placa de este termina en 6, 7, 8, 9 o 0. Cuatro de los cinco días de la semana no podrán circular.
¿Por qué? Por la medida del pico y placa, pues el 31 de enero y el primero y 3 de febrero no podrían movilizarse. Y de los días restantes, 30 de enero y 2 de febrero, solo podrían sacar su vehículo el primero de estos ya que el segundo es el día sin carro en Bogotá. (Le podría interesar: Estas son las fechas para pagar y declarar impuestos en el 2023).
Como respuesta a este malestar, el senador por el Centro Democrático, Miguel Turbay, y el concejal de Bogotá por el mismo partido, Andrés Forero, están trabajando en un proyecto de ley que busca que los dueños de vehículos paguen solo por los días que pueden utilizarlo en sus respectivas ciudades.
Y lo cierto es que, de concretarse esta medida, los cambios sí serían notorios. Solo en el caso de Bogotá, los dueños de vehículos particulares se ahorrarían 32,6% de lo que pagan actualmente en su impuesto vehicular.
¿Cómo se llegó a la cifra?
Las tarifas del impuesto de vehículos para 2023 se fijaron el año pasado y quedaron: 1,5% sobre el valor comercial del carro para cuando el valor es inferior a $52,48 millones, 2,5% para cuando el precio está entre $52,48 millones y $118,03 millones, y 3,5% para cuando supera los $118,03 millones.
Estos son los cambios en el pico y placa en Bogotá que empiezan el 10 de enero de 2023
Partiendo de que este impuesto es anual, se puede dividir el costo en 365, que son los días que tiene el año. Con dicho resultado solo resta multiplicarlo por los días que se podría usar el vehículo, que serían 243 para placas terminadas en 6, 7, 8, 9 y 0; y 249 para las terminadas en 1, 2, 3, 4 y 5, y eso daría el precio a pagar.

De concretarse esta medida, los cambios sí serían notorios.".

Los resultados
En el caso del primer segmento de vehículos, es decir de menos de $52,48 millones, se tuvo en cuenta el carro más vendido durante 2022 según cifras de Andemos. El Kia Picanto cuesta en su versión más básica $52,2 millones. 
Su impuesto hoy en día sería aproximadamente de $780.000 anual (resultado de multiplicar su valor comercial por 1,5%). Mientras que si pagara solo los días en los que el vehículo se puede usar, el pago sería de $519.288 si la placa termina en 6, 7, 8, 9 y 0; y de $532.110 si la placa termina en 1, 2, 3, 4 y 5. (Lea aquí Cayó venta de vehículos usados en julio).
En el segundo segmento de vehículos se escogió el Renault Duster, que tiene un valor de $92 millones. En su caso, el impuesto para 2023 sin el proyecto de Ley sería de $2,3 millones. Mientras que con el cambio, el nuevo cobro sería de $1,53 millones si la placa termina en 6, 7, 8, 9 y 0; y de $1,56 millones si la placa termina en 1, 2, 3, 4 y 5.
Por último, el Mazda CX-5 es el modelo más vendido en los vehículos de $118 millones o más y para 2023 sería responsable de un impuesto de $5 millones. Con la modificación en el gravamen pagaría $3,33 millones si la placa termina en 6, 7, 8, 9 y 0; y de $3,41 millones si la placa termina en 1, 2, 3, 4 y 5.
Qué dicen los expertos
Para José Stalin Rojas, director Observatorio de logística y movilidad (Omlt) de la Universidad Nacional, esta es una propuesta viable en la medida que el impuesto debería ser aplicado en función del uso del vehículo y no causado por la tenencia como se hace ahora.
“Pero, a pesar de ello, la propuesta debe contemplar cómo calcularlo, quizás 50% del impuesto que se paga hoy y cómo cobrarlo por el lado de impuestos distritales”, dijo.
Frente a la posibilidad de que al disminuir este costo las personas cuenten con más incentivos a adquirir carros particulares y, por ende, empeorar la congestión vehicular de la capital, Rojas dijo que no era fuente de preocupación.
“Esa rebaja no alcanzaría para comprar más autos. Se necesitarían de otros incentivos (además de la reducción del impuesto) para que los usuarios contemplen las posibilidades de comprar otro carro”, dijo.
En este sentido, la preocupación para el director del Omlt viene siendo para la administración distrital, pues el recaudo tributario se disminuiría y, en ese orden de ideas, se atrasaría, aún más, el mantenimiento de la malla vial, por ejemplo.
La República.