Al presidente le planteamos que sería un suicidio combinar reforma tributaria con reforma laboral...”.
Jaime Alberto Cabal, presidente ejecutivo de Fenalco
Reveló que “el 90% de las tiendas en Colombia, que son 450 mil, están en estratos 1, 2, 3 y 4 y en esas tiendas el 70% de los productos que venden son los que va a ser impactados con la reforma y se pone en riesgo la viabilidad de las tiendas y podrían desaparecer 250 mil de ellas”. También criticó que “como están planteados los impuesto al patrimonio conjuntamente con el de dividendos y ganancia ocasional. Eso es afectar a las empresas y su capacidad de inversión. Eso se puede morigerar”, concluyó. (Lea también Cambio Radical negará la reforma tributaria).
LA CONTRARREFORMA
“Una mezcla de una reforma tributaria, con impuestos de una meta de ingresos más moderada y con unas fuentes de ingresos que las tiene el Gobierno, pero que no las están incorporando, como la venta de activos improductivos, o los $22 billones en activos incautados al narcotráfico en los últimos 2 años”, es la contrarreforma que plantea Fenalco. Esa fórmula de los comerciantes también incluye colocarle metas a la evasión, a la elusión y al contrabando.
Los comerciantes también mostraron su desacuerdo a la reforma laboral planteada. “Al presidente le planteamos que sería un suicidio combinar reforma tributaria con reforma laboral. El impacto en el sector empresarial, especialmente para sectores como el comercio, turismo, hoteles, restaurantes, bares y empresas de seguridad, sería muy complicado con un crecimiento en los costos de cerca del 35%. Afortunadamente, esa decisión se aplazó y el presidente dio instrucciones a su ministra -de Trabajo- de concertar la reforma con los sindicatos y los gremios, que somos los mayores empleadores de Colombia”, dijo el presidente de Fenalco.
Cabal propone constituir un fondo de reserva de garantía y monetizar lo demás. Por esa vía podrían entrar $15 billones al Gobierno. A ello se le agrega $2 billones de recuperación vía evasión y podríamos pensar en una reforma de $8 billones de nuevos impuestos y no impactar el crecimiento de la economía y el empleo. (Le puede interesar: La reforma de Ocampo y su polémica).
Se podrían cerrar 250 mil tiendas por la reforma tributaria
La Federación Nacional de Comerciantes (Fenalco) reiteró ayer en Cartagena sus discrepancias y coincidencias con el Gobierno frente a la reforma tributaria, pero también presentó su contrarreforma, que a juicio de su presidente ejecutivo, Jaime Alberto Cabal, es una “propuesta con una meta de recaudo más moderada”.
“Coincidimos en algunas metas como la eliminación de la pobreza, atacar la desigualdad, la inequidad, el hambre. También coincidimos en los temas ambientales y la lucha contra el cambio climático, entre otras muchas cosas. No coincidimos necesariamente en todo. Es en el cómo las diferencias. En el qué nos identificamos, en el cómo hacerlo podemos tener discrepancias y a pesar de esas discrepancias es bueno sostener el diálogo, pues de allí pueden surgir puentes e ideas que llevan al mismo objetivo y ese marco de relacionamiento quedó claro con el presidente -Petro- y también con sus ministros”, expresó Cabal, en visita a El Universal, tras asistir a la Asamblea seccional del gremio. (Lea también Reforma tributaria: ¿para dónde iría el recaudo?).
450 mil tiendas existen en el país y con los impactos de la reforma desaparecerían 250 mil. Se estima que existen cerca de 8 mil de estos negocios en Bolívar.
“El Gobierno dice necesitar $25 billones, nosotros creemos que la vía no es la reforma tributaria presentada, por la ambición de la cuantía de los impuestos y porque puede afectar el crecimiento económico y el empleo. También se afecta el ahorro, la capacidad de consumo y la capacidad de inversión y cuando se cruzan todos los impuestos de personas naturales y jurídicas, la resultante es ese impacto sobre la economía. Estamos de acuerdo con el Gobierno en que se requiere financiar el desequilibrio fiscal, pero en desacuerdo en que esa -la reforma- sea el camino”, precisó Cabal.
El dirigente dice que de la propuesta del Gobierno podrían salir impuestos “innecesarios” como el que se pretende a las bebidas azucaradas y alimentos ultraprocesados, que calificó como “un impuesto directo a las clases populares. Va directo al consumo y eso puede impactar en un incremento en los precios de las gaseosas y los otros alimentos, en alrededor del 20%”.
El dirigente dice que de la propuesta del Gobierno podrían salir impuestos “innecesarios”.